La Corrupción en el uso de los recursos públicos, así como en el ejercicio de las atribuciones y facultades de Gobernantes, Legisladores y representantes del Poder Judicial, es el verdadero gran problema del país.
La inseguridad, es una de sus más graves consecuencias. La violencia, otros de sus peores efectos.
El problema más grave del estado mexicano en sus Tres Poderes y tres órdenes de gobierno: federal, estatales y municipales, es la Corrupción en el uso de los recursos públicos.
La inseguridad, es consecuencia de la enorme corrupción en el uso de los recursos públicos, no solo del dinero del Pueblo, sino también del mal uso o del uso faccioso o a favor de intereses de grupo, de las atribuciones y facultades que nuestra Constitución y las Constituciones locales y nuestras Leyes en general, otorgan a los representantes populares e integrantes de estructuras institucionales y de gobierno.
Si bien es cierto que el Estado mexicano no ha sido reconocido como un Estado fallido por las autoridades mexicanas y extranjeras, es verdad que ante la realidad de cada día, el rumbo actual –de indiferencia, de opacidad y de evasivas para combatir preventivamente la corrupción desde los municipios- que mantienen los gobernantes federal, estatales y municipales, nos pone a pensar que de no cambiar la estrategia del sistema de gobierno en sus tres órdenes, habremos de lamentar un grave colapso social en muy pocos años, del cual difícilmente nos podremos recuperar como Nación, aunque digan lo contrario quienes detentan posiciones de Poder desde las elites políticas, económicas, sociales y partidistas.
El federalismo mexicano está en crisis. El Estado mexicano integrado por los Tres Poderes de la Unión, no garantiza los derechos constitucionales de los mexicanos y los habitantes extranjeros en el territorio nacional. Ejemplos sobran en nuestro amado estado de Veracruz y en todo México.
La perturbación social que provocan en la sociedad en general, los hechos de inseguridad no debe ser razón para que perdamos el rumbo de la recuperación nacional; menos para que se manipulen los eventos de violencia en Xalapa, en Poza Rica, en Veracruz o en cualquier parte del país.
Las entidades firmantes del Pacto federal, los estados de la República, en las figuras jurídicas de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, tampoco tienen la capacidad real de dar certeza a los ciudadanos, de mantener los niveles aceptables de seguridad para proteger la vida de las personas y sus patrimonios.
Los Municipios, están en situación de quiebra, aunque se diga lo contrario, aunque se oculte; aunque no se haga público, la mayoría de los municipios del país están infiltrados por la delincuencia organizada que está tipificada en el orden federal, la delincuencia institucional y la delincuencia del fuero común.
La administración de los recursos públicos desde cada orden de gobierno, a nivel federal, estatal y municipal es verdaderamente un ejemplo de corrupción y opacidad; existen lagunas legales que impiden la Transparencia en el origen y destino de los recursos públicos en los tres Poderes de la Unión, en los tres órdenes de gobierno, así como en los tres Poderes de cada entidad federativa. Igualmente en cada municipio.
La solución a este grave problema de la corrupción en México, es una ruta obligada de los gobernantes actuales y de los futuros en los tres ordenes de gobierno.
Las evasivas, las omisiones, las complicidades, la impunidad y la autocomplacencia de la élites políticas de cada uno de los partidos actuales y de los que han pasado por el sistema político mexicano ejerciendo prerrogativas económicas con el dinero del pueblo y basadas en la “Cultura del Reparto”, han llevado al país a vivir la etapa de descomposición política, económica y social que estamos viviendo no desde el años 2000, sino desde hace más de tres décadas.
La falta de seriedad para combatir preventivamente la corrupción en el uso de los recursos públicos por parte de los presidentes de la República, como de los gobernadores y los presidentes municipales, destinando enormes cantidades de dinero para apoyar procesos electorales en favor de sus intereses y/o dejando hacer y dejando pasar distintas desviaciones de recursos, ha traído como consecuencia la creciente perdida de credibilidad por parte del pueblo en los Gobernantes y sus funcionarios; esa falta de credibilidad también alcanza a partidos políticos, Legisladores locales y federales, así como a Jueces y Magistrados.
Con muy pocos casos de excepción, el actuar de activistas de organizaciones ciudadanas y representantes de organismos internacionales como la misma ONU; así como de representantes de las instituciones de la Academia en algunas universidades públicas y privadas, han caído en un circulo vicioso de complacencias, autocomplacencias y elogios mutuos; es decir lanzan loas y otorgan títulos “nobiliarios”, Maestrías y doctorados a los gobernantes y/o funcionarios que generan dudas en el cumplimiento de programas académicos. En algunos casos, la resistencia, obedece a otros intereses de grupo o políticos y económicos de quienes detentan ínsulas de Poder, que han detentado como consecuencia de la dominancia de la “Cultura del Reparto”.
El daño patrimonial, supuestamente de más de 500 millones de pesos en casi una centena de los municipios veracruzanos es un ejemplo más de que la estructura municipal que es la que integra a las entidades federativas y al territorio nacional, está en severa crisis y grave riesgo de perder la capacidad de atención y respuesta a los problemas y necesidades de la sociedad desde la célula básica de nuestra organización política como país.
La falta de absoluta transparencia con la cual inician los nuevos gobiernos municipales, es reflejo de un grave lastre que impacta y afecta negativamente a los habitantes de todos los municipios del estado de Veracruz.
Los enormes montos de subejercicios en las partidas presupuestales autorizadas en distintas materias como la Seguridad Pública, Desarrollo Social, Salud o la construcción de carreteras y su mantenimiento, en cada orden de gobierno: federal, estatales y municipal son verdaderamente lamentables.
Los desastres naturales en Veracruz, y en otros estados del país, -al margen de ser rentables económica, política y electoralmente para los gobiernos estatales- se han convertido en cíclicas vías de empobrecimiento o graves perdidas patrimoniales para grandes sectores de población sin distingos de siglas partidistas o niveles económicos; no hace falta querer aprender de las desgracias en otros países como Brasil o Australia, ahora los más recientes, para que se tomes verdaderas medidas preventivas para evitar mayores desgracias en el próximo ciclo de lluvias. Tampoco será necesario aprender de Haití para asumir las campañas preventivas que eviten en cualquier región del país los brotes de enfermedades como el dengue hemorrágico o la influenza en sus distintas modalidades.
La solución: El Combate Preventivo de la Corrupción desde los Municipios, una Prioritaria Razón de Estado.
Que se basa en impulsar la democracia económica y participativa, para que en los municipios de México, se vivan el crecimiento económico, el desarrollo social y humano, en armonía, seguridad, paz social y corresponsabilidad entre la sociedad y el gobierno.
Los niveles de corrupción en México, han rebasado toda expectativa de solución con los programas y estrategias actuales. En este esfuerzo, existen serios obstáculos políticos y resistencia al cambio estructural, que solo pueden ser sorteadas o superadas con el apoyo firme y convencido de quienes están decididos a defender a México de la corrupción, antes de que los corruptos acaben con nuestra Patria y cancelen las condiciones de convivencia política, económica, social y humana en el territorio nacional .
En México nos necesitamos todos para lograr la seguridad pública y paz social; el crecimiento y desarrollo político, económico, social y humano que aspiramos. Para superar las diversas crisis, rezagos y vicios del sistema político, económico y social, urge un Nuevo Pacto Federal, en el que se reconozca como prioritaria razón de Estado: El Combate Preventivo de la Corrupción. La solución a la corrupción es la verdadera decisión política del Pueblo para exigir a sus gobernantes: El Combate Preventivo de la Corrupción, desde los Municipios, como una prioritaria Razón de Estado.
La solución no solo es por falta de valores como lo dicen funcionarios de todos los niveles; menos por la falta de estructuras especializadas; ambos criterios son fallidos.
Es inevitable para sociedad y gobierno; para Pueblo y gobernantes, asumir nuevas formas de enfrentar un flagelo –el de la corrupción- que es el hilo conductor de todos los problemas nacionales, estatales y municipales.
Esta propuesta es posible en un proceso de sinergia social que sea resultado de un nuevo Pacto social entre sociedad y gobierno y un nuevo Pacto Federal en el que sea incluido el Municipio como firmante y garante efectivo de los derechos y las garantías constitucionales.
La ruta de la ignorancia y la evasión o postergación de las soluciones estructurales para combatir preventivamente la corrupción desde los municipios, como una prioritaria razón de Estado, ha llevado a México a serios retrocesos en su desarrollo humano, político, económico y social.
La solución: El Combate Preventivo de la Corrupción desde los Municipios, una Prioritaria Razón de Estado. Los resultados efectivos serán:
• El Combate Preventivo de la Corrupción en los Tres Poderes del Estado y los tres niveles de gobierno.
• La transparencia en el origen y destino de los recurso públicos desde los municipios.
• Reducir la desigualdad social al generar y distribuir la riqueza nacional con transparencia y honradez. Y,
• El Desarrollo humano, político, económico y social de todos los mexicanos, con más equidad desde los Municipios.
El Federalismo debe tener alcance e identidad con la sociedad mediante el Combate Preventivo de la Corrupción y la transparencia en el origen y destino de los recursos públicos desde los municipios. Crear ciudadanía con bases constitucionales, para que sea un efectivo y preventivo contrapeso a la corrupción e impunidad. Lograr credibilidad en el federalismo como la mejor opción, para la solución de los problemas más graves en su lugar de origen, donde habitan o desarrollan su vida cotidiana. En el municipio, se sufre lo nocivo de la corrupción, en los tres niveles de gobierno, en seguridad, educación, empleo y justicia.
Sirva como referente de mayor contundencia sobre el presente análisis y la “Cultura del Reparto”, la nota que a continuación les comparto:
Truenan dependencias en transparencia: CCE
Publicada en El Economista este 19 Enero de 2011 por Lilia González:
http://eleconomista.com.mx/organismos-empresariales/2011/01/19/incumple-gobierno-federal-63-metas
“El sector privado reprobó a 17 de las 19 dependencias federales por falta de transparencia, al no informar públicamente su desempeño sobre la ejecución de programas en el sexenio de Felipe Calderón, así que las Secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y Reforma Agraria ocupan el último lugar en este segmento.
Al presentar el estudio “Evaluando el desempeño del gobierno federal 2007-2012”, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) determinó que las 19 secretarías apenas alcanzan una calificación promedio de cumplimiento en metas de 37 y 43% en las metas de gestión sobre un rango de 100.
Luis Foncerrada, director del CEESP, dijo que ante el periodo de las elecciones de este año y el 2012, preocupa que las dependencias y los gobiernos estatales utilicen el presupuesto con fines políticos.
“Lo que nosotros queremos es que la pelea electoral se dé por tener un buen gobierno y que la gente se percate de los hechos de cada gobierno y puedan votar; no a través de anuncios en la televisión (sobre los que supuestamente hicieron o harán)”, refirió.
Aunque el gobierno ha puesto “una vara alta” de metas y objetivos en el Plan Nacional de Desarrollo con la visión México 2030, será un reto para la siguiente administración para no sólo fijarse metas, sino llevarlo a cabo.
De esta manera en la lista que integra a las dependencias que no otorgaron información sobre los programas sectoriales, también se incluye a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) con calificación de 8.6 en una escala del 0 al 100, Economía (SE), 12.9; Gobernación (Segob), 14.1; Energía (Sener), 23; Turismo (Sectur), 32.7; Función Pública (SFP), 35.5; Comunicaciones y Transportes (SCT), 38.1; Trabajo (STPS), 39.9; Relaciones Exteriores (SER), 40.4; Educación (SEP), 44.9; PRG, 45.3; Salud, 45.7; Semarnat, 47; Sagarpa, 48.1 y Hacienda (SHCP), 49.
Las que aprueban... Las únicas que pasan de panzazo son Secretaría de Marina 67.1 y la de Defensa Nacional 70.3.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Mario Sánchez, estableció que no se trata de reprobar a la administración de Calderón, sino de mejorar el esfuerzo del gobierno por proponerse metas en los programas sectoriales.
“Si no hay indicadores ni metas, será muy difícil evaluar si vamos bien o mal, ya que no hay parámetros de referencia. Probablemente esto puede ocurrir cuando un gobierno o cualquier institución, pretendan evitar que se le evalúe de manera objetiva, simplemente por mostrar malos resultados”, sentenció el líder del CCE.
También, el sector privado demandó al gobierno eliminar programas sectoriales que no benefician a la población, los que tienen dueño, aquellos en los cuales un grupo de presión levanta el dedo, vota y se aprueban recursos; aunque, Foncerrada no precisó qué tipo de programas, debido a que Hacienda ya trabaja sobre el tema.”
La Corrupción es la causa…
La inseguridad, uno de sus efectos…
La solución: El Combate Preventivo de la Corrupción desde los Municipios, una Prioritaria Razón de Estado
¿Lo entenderán los gobernantes federal, estatales y municipales; Legisladores y representantes del Poder Judicial de la federación y los estados, sin importar siglas partidistas?
VEREMOS…
